Ser agradecidos es el fruto de conocer a Dios. Nuestra gratitud es una forma de alabar a Dios.
En una oportunidad se me asignó hablar de este tema, y con sinceridad estuve a punto de decir que no. Pensé:
Denme otro tema, ¿hablar de ser agradecidos?, es solamente es dar gracias y ya!, existen otros temas más profundos e interesantes.
Sin embargo, pude entender por qué Dios me habia asignado hablar de ello. Mientras pensaba en el tema, el Señor traía a mi corazón lo siguiente:
¿No puedes hablar de lo importante de dar gracias?, ¿no tienes nada de qué agradecer?. Quien no tiene nada que agradecerme a mi, no me conoce.
Por eso, en esta corta enseñanza, quiero llevarte al centro de nuestra gratitud. Y comprender por qué debemos ser agradecidos, así como los efectos que tiene en nuestra vida diaria.
La actitud de Job
Como padre, tanto mi esposa como yo, le enseñamos a nuestra hija, mientras va creciendo nuevas cosas, entre ellas, el dar las gracias. Cuando una persona agradece a otra, asi sea por cosas muy pequeñas, muestra un nivel de actitud y educación diferente, esa persona demuestra con sus acciones lo que ha aprendido.
El Señor me mostraba algo nuevo, con respecto a la gratitud. Siempre damos gracias por las cosas que recibimos o esperamos recibir. Nuestra atención siempre apunta hacia nosotros. Me das algo, haces algo por mi o haces lo que te pido, entonces te doy las gracias. Pero, ¿y que si no?.
Últimamente se parece mucho la relación que tienen muchos hoy en día con el Señor y lo oyes repetidamente en las iglesias. Un evangelio materialista, instantaneo y egoista, centrado en el YO.
Dame, dame, dame, si me das, te doy las gracias, pero ¿y si no?, existe un silencio grande. Las personas buscan satisfacer sus necesidades y si no les resulta y reciben un NO de Dios entonces ¿qué hacen?. No le agradecen, se van, o dicen, esto no es para mi.
El diablo y el mundo siempre se van a centrar en ti. Tú eres el centro del universo, tú puedes ser como Dios. Tú mereces ser aplaudido y honrado. Tú sabes lo que mas te conviene. Tú, tú, y sólo tú.
Por esa razón muchos matrimonios hoy dia rompen, porque son individualistas. Se oye decir: si ya no soy feliz contigo entonces me divorcio.
Otros concienten en mejor no casarse y viven juntos pero sin comprometerse, asi son más fáciles las cosas. Obtienes lo que quieres, pero no hay un compromiso por eso. En cualquier momento me puedo ir y nadie puede detenerme.
¿Eso no fue lo que el diablo le dijo a Eva?: “¿con que Dios te dijo eso?, no! así no son las cosas, ésta opción que te muestro es mejor para ti.” (parafraseado y no literal).
¿Te imaginas si Job hubiera reaccionado de la misma manera?. La historia hubiese sido muy diferente. Pero Job hizo algo, después de todas las primeras calamidades que le sucedieron:
Entonces Job se levantó, y rasgó su manto, y rasuró su cabeza, y se postró en tierra y adoró, y dijo: Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo volveré allá. Jehová dio, y Jehová quitó; sea el nombre de Jehová bendito.
Job 1:20-21
Job era un hombre rico, con prestigio, con familia, pero en un solo día lo perdió todo y sin embargo adoró a Dios, ¿por qué?.
La respuesta está en que su gratitud no apuntaba hacia él mismo, su atención y toda su vida no consistía sólo en él. Job sabia que todo lo que habia recibido habia sido prestado, otorgado por Dios, no por merito propio.
Su gratitud apuntaba a Dios, y sólo Él debe y merece recibir nuestra alabanza, si Él da y quita, aún Él tiene el control y lo que nos toca es confiar en Él.
Nuestra gratitud no debe depender de lo que recibimos o no. Nuestra gratitud apunta a Dios y quién es Él. Le agradecemos por quién es Él, no sólo por lo que recibimos. Es éste aspecto debemos aprender de Job, que honrando a Dios por lo que recibimos y por lo que nos quita.
Entonces, sin ese peso encima de sólo agradecer por lo bueno que nos pasa, podemos alabar a Dios con toda libertad. Si sabemos que Dios está al mando de todo, podemos reconocer que si Él nos quita algo, es porque es lo mejor para nosotros. Sino entonces, ¿cómo podemos llamarle Señor si somos nosotros los que siempre queremos decidir lo que nos conviene?.
Me hace recordar la pelicula Todopoderoso de Jim Carrey. Al final, luego de tener todo el poder y hacer todo lo que le daba la gana, y volver todo un desastre, se arrodilla en medio de la calle y dice:
“Basta, ya no puedo mas, quiero que Tú decidas lo que es mejor para mi”.
Esa es una oración profunda y poderosa. Si tú conoces a Dios y le das el mando sobre tu vida, tus decisiones, tus pensamientos, tus sueños, tu destino, tu tiempo y todo lo demas, puedes tener la libertad de agradecerle, por todo. Porque todo te va a ayudar para bien:
Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.
Romanos 8:28
Esto quiere decir, que ninguna circunstancia en tu vida es por casualidad o al azar (como muchos piensan) o por obras del destino, sino que va guiado a lo que Dios tiene destinado para nosotros y sus pensamientos son mayores que los nuestros.
El centro de nuestra gratitud
La Biblia enseña:
1 Tesalonicenses 5:18
Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús.
El motivo de nuestra gratitud y alabanza a Dios no es por lo que recibimos solamente, es por quien es Él que nos da y quien nos quita, quien abre y cierra puertas, porque Él es nuestro Señor.
Entonces el centro de nuestra gratitud ya no son las cosas materiales, como hoy dia se predica en muchas iglesias, es Dios, Él y sólo Él es y debe ser el centro de nuestra gratitud.
El mundo te dice, se trata de ti, pero la Biblia dice que se trata de Él, ¿a quién le vas a creer?.
Para agradecerle, debes conocerle. Yo soy el que soy, es el nombre que se le dio a Moisés.
Dijo Moisés a Dios: He aquí que llego yo a los hijos de Israel, y les digo: El Dios de vuestros padres me ha enviado a vosotros. Si ellos me preguntaren: ¿Cuál es su nombre?, ¿qué les responderé?. Y respondió Dios a Moisés: YO SOY EL QUE SOY. Y dijo: Así dirás a los hijos de Israel: YO SOY me envió a vosotros.
Éxodo 3:13-14
El tetragrámaton, YHWH, como se conoce en los medios teológicos, seria la traducción de la frase completa, Yo soy el que soy. Es un verbo, es el verbo SER. No entraremos en detalles del origen del nombre en hebreo, sino del significado.
No se trata de quién es Dios para ti, se trata de quien dice Él que ES, y sólo en la Biblia aparece quién es Él y lo revela.
El mundo hoy, quiere definir a Dios, y te dice que Dios es lo que tu quieras que Él sea, pero eso es falso. Nadie puede decir quién es Él más que Él mismo.
Lo más interesante de todo es que YHWH es definido como un verbo, y solo hay uno que es llamado el Verbo de Dios en toda la Biblia y se llama, Jesús.
En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. Este era en el principio con Dios. Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.
Juan 1:1-3
Entonces vi el cielo abierto; y he aquí un caballo blanco, y el que lo montaba se llamaba Fiel y Verdadero, y con justicia juzga y pelea. Sus ojos eran como llama de fuego, y había en su cabeza muchas diademas; y tenía un nombre escrito que ninguno conocía sino él mismo. Estaba vestido de una ropa teñida en sangre; y su nombre es: EL VERBO DE DIOS. Y los ejércitos celestiales, vestidos de lino finísimo, blanco y limpio, le seguían en caballos blancos. De su boca sale una espada aguda, para herir con ella a las naciones, y él las regirá con vara de hierro; y él pisa el lagar del vino del furor y de la ira del Dios Todopoderoso. Y en su vestidura y en su muslo tiene escrito este nombre: REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES.
Apocalipsis 19:11-16
Continuemos conociendo que dice la Biblia, acerca de quién es Dios. Sólamente de Salmos 103 podemos obtener un poco de lo que Él es:
- Es Santo. 103:1
- Es Bendito. 103:1-2
- Perdonador. 103:3
- Sanador. 103:3
- Rescatador, Salvador. 103:4
- Enriquecedor. 103:4
- Proveedor. 103:5
- Rejuvenecedor. 103:5
- Justificador. 103:6
- Misericordioso y clemente. 103:8
- Creador. 103:19
- Rey de reyes. Nadie esta por encima de Él. 103:19
- Jehová de los ejercitos. Él pelea por nosotros. 103:20-21
En el Evangelio de Juan, Jesús dijo:
- Yo soy, no temais. 6:20, como en el Salmos 23:4
- Yo soy el pan de vida. 6:35
- Yo soy la luz del mundo. 8:12
- Yo soy el que doy testimonio de mí mismo, y el Padre que me envió da testimonio de mí. 8:18
- Yo soy de arriba. 8:23
- Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos. 10:9
- Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas. 10:11
- Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. 11:25
- Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. 14:6
- Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador. 15:1
Esto, por supuesto, es tan solo un resumen de lo que Él dice que ES en su Palabra.
Si creemos lo que Él es y le ponemos al mando de nuestra vida, entonces viviremos como a Él le agrada, y le agradeceremos en cualquier circunstancia, porque sabemos que Él tiene el control.
Dar gracias en todo, no es sólo cuando todo te salga bien, tambien cuando resulte en lo que no esperas.
Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él.
Colosenses 3:17
Ser agradecidos y la voluntad de Dios.
Aceptar los Si y No de Dios es parte de someterse a su voluntad y debemos ser agradecidos con ello porque siempre es para nuestro bien.
Sino entonces, ¿para qué sirve la oración cuando decimos: “Hagase tu voluntad, como en el cielo, asi tambien en la tierra.”?. ¿Son sólo palabras o estamos concientes de lo que decimos?.
No debemos cometer los errores de cristianos, que por ignorancia, o tal vez arrogancia, le dicen a Dios: No aceptamos un no como respuesta. Eso es totalmente antibíblico, falso y hasta un poco de falta de respeto. Nuestro rol debe ser orar pidiéndole al Señor que se haga su voluntad y le agradeceremos por su decisión. Al tú decirle al Señor eso, lo pones al volante y te quitas tú.
Los planes son del hombre; la palabra final la tiene el Señor.
Proverbios 16:1 DHH
La suerte se echa en el regazo; Mas de Jehová es la decisión de ella.
Proverbios 16:33 RV1960
Esto por supuesto, no quiere decir que le des gracias a Dios por la enfermedad, la miseria o las desgracias que te puedan ocurrir en la vida, creyendo que fue Él quien te las envió.
Job no agradeció por las desgracias que le vinieron. ¿Te imaginas a Job diciendo, Dios te doy gracias por los hijos que fueron asesinados, o que me robaron todo lo que tenía y quedé en la ruina?.
Job levantó sus manos y adoró a Dios, porque vio en medio de todas las desgracias que habia UNO, que aunque todo se derrumbara, se mantenia firme, inamobible, y era en quién sabia que no lo dejaría sólo ni lo abandonaría.
Por eso Job dijo, “sea el nombre de Jehová bendito“, su fé y su confianza en el Señor iban más alla de las circunstancias.
Job levantó las manos y se rindió ante el Señor, porque sabía que Él todavía estaba al mando.
Por eso, si estas atravesando por un momento doloroso, o atribulado por algo, no debes agradecer por lo malo que te acontenció, sino que debes agradecer y orar confiando que Dios mismo te va a consolar y llevar a puerto seguro, porque es lo que Él Es.
Pacientemente esperé a Jehová, Y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; Puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. Puso luego en mi boca cántico nuevo, alabanza a nuestro Dios. Verán esto muchos, y temerán, Y confiarán en Jehová.
Salmos 40:1-3
Por otro lado, si has estado orando por alguna circunstancia en particular, un novio, un negocio, una inversión, o cualquier otra cosa en la vida, y recibes un No de Dios, entonces debes agradecer que Él te guió.
Por ejemplo, digamos que eres una joven, y tienes un noviazgo. Todo pareciera bien, pero decides orar desde el principio, y entregar esa relación al Señor, y le dices: “Señor, te doy mi noviazgo, sólo tú conoces lo que es mejor para mi. Si él no es bueno para mi, por favor apártalo de mi y ayúdame a superar toda separación y dame paz. Que no se haga lo que yo quiera sino lo que Tú.”
Pueden pasar 2 cosas. Puede suceder que tu novio, se consagre más y sea lo que ella espera y ella sienta la paz de Dios y como también puede suceder que la relación vaya de mal en peor al punto de llegar a un rompimiento. Para ambas situaciones, si previamente lo pusimos en las manos del Señor y dejamos que Él sea el Juez, debemos agradecerle.
Fenezca ahora la maldad de los inicuos, mas establece tú al justo; Porque el Dios justo prueba la mente y el corazón.
Salmos 7:9
Jeremias 11:20
Mas, oh SEÑOR de los ejércitos, que juzgas rectamente, que examinas los sentimientos y el corazón,
Justo es el SEÑOR en todos sus caminos, y bondadoso en todos sus hechos. Salmos 145:17
Jeremias 12:1
Justo eres tú, oh SEÑOR, cuando a ti presento mi causa; en verdad asuntos de justicia voy a discutir contigo.
Todo ésto, nos llena de confianza que Él, siendo el Juez de toda la tierra, va a decidir rectamente y dar el pago y la resolución que es necesaria. Por todo ello, debemos ser agradecidos.
Orando y agradeciendo.
“Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.”
Filipenses 4:6
No siempre recibimos lo que pedimos, a veces no de la manera que pensamos. A veces pensamos que nuestras oraciones quedan en el vacío, o que tal vez Dios se olvidó de ello o está mas ocupado creando mas planetas y estrellas para que los científicos no le hayen fin al universo.
Dios siempre contesta, de alguna u otra manera, y aunque en un momento pareciera que su respuesta no es lo que esparabamos, al final resulta siempre mejor de lo que pensábamos.
El ejemplo en la Biblia, lo tenemos en José, Sansón o Daniel, y en muchos otros casos, donde al final Dios les contestó sus oraciones, pero en diferente manera de como pensaban, pero siempre el resultado era mejor.
Justo es el SEÑOR en todos sus caminos, y bondadoso en todos sus hechos.
Salmos 145:17
¿Qué pues, hizo la diferencia?. La fé.
Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.
Hebreos 11:6
Por eso debemos orar y agradecer aceptando lo que Él nos dará como respuesta.
Agradecemos a Dios con alabanzas, con palabras, en oración, con danza, con aplausos, con alegría o con lágrimas.
Agradecemos a Dios en las buenas y en las no tan buenas, en su Si y en su No, porque le conocemos y sabemos quien es Él.
No desperdicies una maravillosa oportunidad de conocerle y agradecerle. De vivir alabando y bendiciendo su Nombre, porque Él sabe lo que más te conviene a ti.
Si hasta ahora no le conoces, pero deseas dejar de vivir a la deriva y sin rumbo fijo, y deseas vivir en libertad y agradecido por cada dia y circunstancias, este es el momento de conocerle y recibirle y entregarle el control y mando de tu vida.
Reconoce a Jesús como el Camino que necesitas, la Verdad que buscabas y la Vida que no tenias ahora y comienza a vivir en gratitud para Dios y Él se encargará de transformar tu vida para siempre.